El futbolista Pape Cheikh (25) se incorpora desde hoy al trabajo con el primer equipo del Elche CF. El mediocentro senegalés, con nacionalidad española, cuenta con amplia experiencia en LaLiga con el RC Celta de Vigo – donde jugó durante dos etapas – y en el fútbol europeo en clubes como el Olympique de Lyon, Dijon o Aris. Cheikh se encuentra sin equipo y trabajará a las órdenes del míster, Pablo Machín, y su staff, junto al resto del grupo, para determinar su posible contratación.

Tras la salida de Domingos Quina en el último día del mercado de fichajes del mes de enero, el centro del campo de Machín quedó algo cojo. La distancia en cuanto al rendimiento de Gumbau y Omar con respecto al resto de jugadores en esa posición – únicamente Guti – es abismal. Y eso que la primera vuelta de ambos ha sido bastante floja. Incluso estando mermados físicamente se han visto obligados a completar la gran mayoría de los encuentros.

La opción de Mickaël Malsa fue la que más fuerte sonó durante el mercado para reforzar la posición. Una opción quizá más reconocible para el aficionado franjiverde, que le suena el nombre de Pape Cheikh a tiempos pasados. El mediocentro senegalés comenzó a destacar a una edad muy temprana (19) en el primer equipo del Celta de Vigo. El Olympique de Lyon no dudó en desembolsar 10 millones de euros en el verano de 2017 y llevárselo a la Ligue 1.

En Lyon no duró más de dos campañas; primero un primer año en el que tuvo una complicadísima adaptación – tan solo disputó un partido de Liga – y una segunda temporada en la que contó algo más para Bruno Génésio. En dicho curso, la 18/19, destacó un encuentro de fase de grupos de la UEFA Champions League en el Etihad Stadium, donde lograron imponerse al Manchester City (1-2). La actuación de Pape llamó la atención pero no llegaría a dar el salto, como sí lo hicieron los Ferland Mendy, Tanguy Ndombélé, Maxwel Cornet o Memphis Depay.

Tras su discreto paso por Lyon, regresó al Celta, esta vez como cedido, en la temporada 2019/20. Pape comenzó bien con Óscar García, ganándose su confianza y continuidad en el cuadro celeste. Pero de la nada desapareció incluso de las convocatorias y completó una segunda vuelta en la que tan solo participó en cuatro encuentros y estuvo cerca de ver a su equipo descendiendo a la Liga Smartbank.

Su club de formación no quiso quedárselo en propiedad y regresaría a Francia, donde se marcharía cedido al Dijon esta vez. Allí sí logró continuidad; eso sí, un equipo condenado al descenso desde la jornada 1. Tan solo ganaron cuatro encuentros en toda la liga, descendiendo con 21 puntos. Terminada la temporada, regresaría al Lyon para la 21/22, donde solo disputó un partido en National 2 con el Lyon B. Un año perdido para un jugador de tan solo 24 años.

Este verano, tras cuatro años de contrato con el Lyon, finalizó su vinculación y se fue libre a Grecia. En el Aris de Salónica, entrenado por el mítico Alan Pardew (cc La Media Inglesa), ha estado jugando con regularidad hasta ahora. Un Pardew que ha sido cesado hace escasos días, como el propio Cheikh, que no continuó en el equipo tras el mercado de invierno.

No es una carrera extraordinaria que digamos. Los primeros encuentros en la élite de Pape Cheikh hacían presagiar que valdría, como mínimo, los diez millones que llegó a pagar por él el Lyon. Pero desde que salió de España no ha podido progresar y ahora regresa con la intención de ganarse la confianza de Machín y reconducir su carrera.

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